Sábado 30 de Diciembre 2023
SALUD

5 tips para descansar y dormir mejor

Un buen descanso es fundamental para la concentración, la memoria y la capacidad de tomar decisiones.

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Escrito en ESTILO DE VIDA el

Dormir bien es de vital importancia para mejorar nuestra salud en diversos aspectos. En primer lugar, un sueño adecuado contribuye al funcionamiento óptimo del sistema inmunológico, lo que nos ayuda a prevenir enfermedades y a combatir infecciones de manera más eficiente. Durante el sueño, se producen cambios en la actividad de las células inmunológicas, lo que fortalece nuestra respuesta inmune y nos hace más resistentes a los agentes patógenos.

Además, dormir lo suficiente y tener una buena calidad de sueño tiene un impacto significativo en nuestra salud mental y emocional. El sueño adecuado favorece la regulación de las emociones y contribuye a un estado de ánimo equilibrado. La falta de sueño, por el contrario, se ha relacionado con un mayor riesgo de desarrollar trastornos del estado de ánimo, como la depresión y la ansiedad.

Asimismo, el sueño reparador ayuda a mejorar la concentración, la memoria y la capacidad de tomar decisiones, lo que influye positivamente en nuestro rendimiento cognitivo y en nuestras habilidades de aprendizaje. Con este contexto, acá te dejamos 5 tips para descansar y dormir mejor.

1. Establece una rutina de sueño consistente

El organismo tiene una especie de reloj interno que regula el ciclo del sueño-vigilia, y establecer una rutina regular ayuda a sincronizarlo. Intenta acostarte y levantarte a la misma hora todos los días, incluso los fines de semana. Esto ayudará a regularizar tu ciclo de sueño y te permitirá conciliar el sueño más fácilmente.

También, puedes dedicar al menos 30 minutos antes de acostarte a actividades tranquilas que te ayuden a prepararte para dormir. Si bien el ejercicio regular puede ayudar a mejorar la calidad del sueño, debes evitar hacer ejercicio intenso demasiado cerca de la hora de dormir, ya que puede tener un efecto estimulante en lugar de relajante.

2. Crea un ambiente propicio para el sueño

Tu entorno juega un papel crucial en la calidad de tu sueño. Asegúrate de que tu habitación esté oscura, tranquila y a una temperatura adecuada. Utiliza cortinas opacas, tapones para los oídos o máscaras para dormir, si es necesario. Además, evita el uso de dispositivos electrónicos antes de acostarte, ya que la luz azul puede alterar tu ritmo de sueño.

Las velas aromáticas pueden jugar un papel importante a la hora de crear un ambiente propicio para el sueño, ya que lo asociamos con la hora de dormir y nos permite acostarnos con el cuerpo dispuesto a relajarse. Es importante no dejarlas encendidas durante toda la noche para evitar accidentes.

3. Practica una rutina de relajación antes de acostarte

Establecer una rutina relajante antes de dormir puede ayudarte a preparar tu mente y cuerpo para el descanso. Puedes probar técnicas como tomar un baño caliente, practicar meditación o realizar ejercicios de respiración profunda. Estas actividades reducirán el estrés y te ayudarán a relajarte antes de ir a la cama. Es importante limitar el consumo de nicotina, especialmente en las horas previas a acostarte. Estas sustancias pueden dificultar conciliar el sueño.

4. Limita el consumo de estimulantes y alimentos pesados

Evita el consumo de bebidas energéticas y cafeína en general en las horas previas a acostarte, ya que pueden dificultar conciliar el sueño. Además, evita las comidas pesadas o picantes antes de dormir, ya que pueden provocar malestar estomacal y dificultar tu descanso.

5. Cuida tu colchón y almohadas

La comodidad de tu cama juega un papel importante en la calidad de tu sueño. Asegúrate de tener un colchón y almohadas adecuados y cómodos que se adapten a tus necesidades. Si notas que tu colchón está desgastado o incómodo, considera reemplazarlo para mejorar tu calidad de sueño.

Para prolongar la vida útil del colchón y evitar el desgaste desigual, gíralo y dale la vuelta cada 3-6 meses, o según las instrucciones del fabricante. Por su parte, las almohadas también tienen una vida útil limitada. Si notas que tu almohada está desgastada, aplastada o ya no brinda el soporte adecuado, es hora de reemplazarla.

Es importante recalcar que cada persona es única, por lo que puede que algunos consejos funcionen mejor para ti que otros. Experimenta y encuentra las rutinas y hábitos que te ayuden a dormir mejor y que esto repercuta de manera positiva en tu salud. Al seguir estos consejos, estarás en camino hacia una noche de descanso reparador y una mejor salud en general. ¡Dulces sueños!