Increíble receta de tarta de castañas

No hay peor sensación que llegar a la hora de la merienda sin nada rico con lo cual acompañar el té o el café. La pastelería es lo mejor con lo que cortar la media tarde, y los frutos secos están a la orden del día. Si estabas buscando una receta con un postre rico y ligero, llegaste al lugar adecuado.

En el postre que te traemos hoy las castañas y el queso son las protagonistas. Toma nota y apúntate esta nueva y facilísima receta de ‘cheesecake’ de frutos secos.

Ingredientes:

• 300 gramos de castañas
• 300 mililitros de leche entera
• 150 gramos de azúcar morena o mascabada
• 300 gramos de queso crema
• 4 huevos
• 1 pizca de sal
• ½ cucharadita de anís (opcional)

Preparación:

Las castañas

1. Limpia las castañas y haz una pequeña incisión a cada una con un cuchillo. Esto es para evitar que se abran y salten al cocinarse.
2. Ásalas en el horno, la sartén o el microondas. Ten en cuenta que el tiempo que pasen cocinándose será distinto según el procedimiento que sigas.
3. Una vez estén asadas, déjalas enfriar y luego pélalas. Procura retirar la fina capa interna también.

La nata

1. Pon la leche en la hornalla junto con el azúcar, la sal y el anís. Remueve con suavidad unos minutos, echa las castañas dentro y deja hervir.
2. Cuando la leche haya roto a hervor, baja el fuego al mínimo y déjalas alrededor de 15 minutos más.
3. Transcurrido el tiempo, pasa todo el contenido a tu batidora y bate a potencia máxima para triturar los frutos. Tiene que quedarte una crema fina con una textura similar a la del puré de patatas. Lleva a la nevera y deja reposar 5 minutos.
4. Luego, saca la nata de castañas y agrégale el queso crema. Ve incorporándola a la mezcla con ayuda de una cuchara.
5. Cuando logres una composición homogénea, agrega los huevos y sigue mezclando hasta que esté todo bien integrado: finaliza con un batido a velocidad media por unos minutos.

La cocción

1. Unta el molde con mantequilla y luego espolvoréalo con harina. Procura retirar el exceso.
2. Vierte dentro la nata y lleva el 'cheesecake' a la nevera durante unos pocos minutos para que la mezcla se asiente y no se formen burbujas.
3. Precalienta el horno a 180°C durante 15 minutos. Luego mete el molde en la zona intermedia para que le llegue temperatura de arriba y de abajo. Hornea entre 45 y 60 minutos.
4. Deja que se enfríe a temperatura ambiente, desmolda y coloca en una bandeja. Una vez frío, lleva a la nevera para que se compacte. Deja que transcurra al menos 1 hora antes de servir.

Esta receta se caracteriza por un sabor suave y muy cremoso, además de ser súper ligera. Nosotras la cocinamos sin base de galleta, pero tú puedes incluírsela si gustas. Decora a gusto (puede ser con azúcar glas, pasta de castañas arriba, jalea o virutas de chocolate) ¡y listo!