Que tu perro no te haga caso puede ser un engorro, más aún cuando intentas de todo para educarlo y no hay forma. Si cuando lo sacas a pasear, se pelea con todos los perros, o tironea mucho de la correa, o mismo rompe todo en tu casa, y por más que lo retes no hay forma que obedezca, te contaremos cómo puedes lograrlo.
El hecho de que tu perro no te haga caso es muy común, casi todos los perros suelen no hacer caso en algún momento, aunque algunos sí tienen un problema severo, en dónde se debe consultar con un etólogo canino. Pero, por lo general, se suele dar por una mala comunicación.
A veces ocurre que el perro no hace caso por siempre instinto, en dónde lo que quiere hacer es más fuerte que la orden que tú le des. Aunque tal vez sea porque no ha entendido la orden que le estás dando.
También suele ocurrir que quizás su adiestramiento se haya basado en el castigo, y no en la recompensa, algo que en realidad no es recomendable, ya que no es efectivo en lo más mínimo, al contrario, es muy contraproducente para el desarrollo de la personalidad del animal.
Un consejo es que refuerces el vínculo afectivo con tu mascota, por el hecho de que cuanto más estrecho sea este, más te obedecerá. Intenta pasar más tiempo con él, como en los paseos y los juegos. Ten rutinas concretas para que te acostumbres a ellas.
Por otro lado, puede que tu perro no te obedezca porque das órdenes contradictorias o usas un lenguaje demasiado complejo que él no acaba de comprender. Ten en cuenta ser muy directo y claro con lo que le pidas.
Ante esto, puedes aplicar un entrenamiento con refuerzo positivo. Esto implica practicar ejercicios sencillos con tu mascota que al final tengan premio. Por ejemplo, puedes pedirle que te dé la pata cuando tú se lo pidas y cuando lo haga, le das un premio.
También ten presente que tu expresión facial y lenguaje físico vaya en concordancia con tus gestos, postura, el tono de voz y hasta con tu mirada, ya que la comunicación se basa en todo esto. Con estos datos podrás hacer que tu perro te haga caso.