Campanopolis es un pueblo único en el mundo, ubicado a solo 40 kilómetros de Buenos Aires, Argentina. Su creador fue Antonio Campana, un empresario que soñó con construir un lugar mágico y misterioso, inspirado en las historias de fantasía que leía de n*iño.
El pueblo de Campanopolis tiene más de 100 edificios de diferentes estilos y épocas, desde castillos medievales hasta cabañas alpinas, pasando por iglesias góticas y casas coloniales. Todos ellos fueron hechos con materiales reciclados y objetos antiguos que Campana fue recolectando durante años.
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Campanopolis está rodeado de naturaleza y ofrece a sus visitantes la posibilidad de recorrer sus calles empedradas, admirar sus fuentes y esculturas, y disfrutar de su tranquilidad y encanto. El pueblo también alberga un museo, una biblioteca, un teatro y un taller de arte, donde se realizan actividades culturales y educativas.
El pueblo mágico y misterioso que parece sacado de un cuento de hadas es una obra de amor y creatividad, que refleja la pasión y la visión de su fundador. Campanopolis es un lugar que invita a soñar y a viajar en el tiempo, una experiencia única e inolvidable para quienes lo visitan.
Campanopolis no solo es un pueblo de ensueño, sino también un proyecto social y ecológico. El pueblo genera su propia energía eléctrica con paneles solares y molinos de viento, y cuenta con un sistema de recolección y tratamiento de agua. Además, el pueblo ofrece oportunidades de trabajo y capacitación a personas de escasos recursos, que colaboran en su mantenimiento y desarrollo.
El pueblo fue inaugurado en el año 2000, después de más de dos décadas de trabajo de Campana y su equipo. Desde entonces, ha recibido miles de visitantes de todo el mundo, que quedan maravillados con su belleza y originalidad. Campanopolis es un homenaje a la imaginación y al arte, un lugar donde todo es posible.