El ejercicio y una buena alimentación son las claves para mantener una excelente salud en todas las edades de la vida.
Estudios recientes demuestran que la práctica de ejercicio por parte de adultos mayores es más importante, incluso más que cuando lo hacen siendo más jóvenes.
El motivo principal es que la actividad física retrasa los efectos del paso del tiempo, preservando nuestro organismo y ayudando a mantener nuestros órganos internos sanos y en buen funcionamiento. Además, ayuda a una más rápida y mejor recuperación en caso de lesiones.
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Los mayores beneficios de ejercitarse a esta edad son:
- Previene y retrasa el envejecimiento prematuro, tanto interior (de los órganos) como exterior.
- Previene las enfermedades cardiovasculares (hipertensión, trombosis).
- Previene los problemas respiratorios.
- Previene los problemas digestivos.
- Previene atrofias, lesiones musculares y óseas.
- Mejora la movilidad articular.
- Mantiene la capacidad respiratoria.
- Potencia la fuerza, la resistencia y la flexibilidad.
- Mejora los reflejos, la coordinación y el equilibrio. Reduce el riesgo de caídas.
- Mantiene el peso, evitando la obesidad.
- Acelera la recuperación después de una enfermedad o lesión.
- Mantiene la autonomía física.
- Nos permite conocer las limitaciones y aceptar que el propio organismo va cambiando con la edad.
Beneficios psíquicos
Además de los físicos, ejercitarse también aporta beneficios a nuestra salud mental:
- Trabaja con la memoria y la atención.
- Mejora la autoimagen y la autoestima.
- Mejora el estado de ánimo, previniendo o mejorando la depresión y la ansiedad.
- Permite mantener la autonomía psíquica.
Otros beneficios
La etapa adulta supone, muchas veces, una pérdida de nexos sociales. La jubilación, los hijos grandes que se van de casa y la pérdida de seres queridos tiene un impacto a nivel emocional muy importante.
En este sentido, ejercitarse es una excelente herramienta para:
- Ocupar el tiempo libre con actividades de ocio saludables.
- Evitar la soledad.
- Sentirse integrado en un grupo.
- Hacer nuevas amistades con personas que pueden tener ideas diferentes, lo que nos invita a pensar en nuevos temas.
- Rejuvenecernos por el contacto con gente más joven.
Siempre antes de encarar cualquier rutina de ejercicios o actividad física, la principal recomendación es una visita al médico y un chequeo general para conocer el estado de salud, y las posibilidades y limitaciones que podemos tener, para no forzar al organismo de manera innecesaria.